DÍA A DÍA
Figura 1. Soportes
© Mónica del Collado
El soporte es un material que, como indica María Fernanda Valverde (2003: 11), sirve para alojar el resto de los componentes fotográficos. Aunque los soportes de las fotografías han comprendido una amplia gama, los más usados han sido el papel, el vidrio, el metal y el plástico.
En sus inicios, el proceso de Nicéphore Niépce que vio nacer al quehacer fotográfico, empleó como soporte el papel de fibra. El uso de éste se extendió durante todo el siglo XIX y gran parte del XX, pero en 1968 comenzó a ser desplazado por el recién inventado papel Resin Coated (mejor conocido por sus siglas, RC), tipo de soporte con un recubrimiento de polietileno, menos permeable ante las sustancias químicas del procesado y, por esa razón, más resistente (Image Permanence Institute, 2019).
Los soportes metálicos, cuyo uso también se hizo patente en el siglo XIX, sirvieron a procesos fotográficos como el daguerrotipo y el ferrotipo, mientras que el vidrio fue el soporte predilecto para los negativos de colodión y, por ende, del ambrotipo —colodión con un respaldo o superficie oscura que permite la observación de la imagen en positivo (Villanueva, 2012)— así como para los negativos de plata-gelatina.
El peso del vidrio y su fragilidad replantearon la necesidad de crear un nuevo tipo de soporte, más ligero y flexible. Se creó así el primer soporte plástico, hecho de nitrato de celulosa y plastificantes (Valverde, 2005). La incursión en el mercado del nitrato de celulosa, en 1889, sentó los precedentes de la industria cinematográfica. Debido a la inestabilidad química del material, por su alto grado de inflamabilidad, en 1951se sustituyó por el acetato de celulosa. En 1955 se desarrolló el soporte de poliéster (polietilentereftalato) que, pese a su gran estabilidad, no logró reemplazar por completo al acetato de celulosa (Valverde, 2003).
Figura 2. Aglutinantes
© Mónica del Collado
Antes de la década de 1850, como describe María Fernanda Valverde (2003), las partículas formadoras de la imagen se encontraban alojadas directamente sobre el soporte de papel. Como consecuencia de la calidad y nitidez conferida a la imagen, se comenzó con el uso de sustancias aglutinantes, medio o estrato transparente, de naturaleza orgánica o sintética, que permiten la adherencia entre las partículas formadoras de la imagen y el sustrato o soporte de la fotografía (Villanueva, 2012).
Los aglutinantes que han tenido mayor uso en la conformación de los materiales fotográficos han sido la albúmina, el colodión y la gelatina.
El colodión, presentado en 1851 por Frederik Scott Acrher, "revolucionó las técnicas existentes hasta entonces, al permitir la obtención de placas negativas sobre soportes de vidrio" (Valverde, 2003: 29). Consiste en una solución de nitrato de celulosa con algodón, éter, alcohol etílico y sales de plata (yodo o bromo, usualmente), y fue usado hasta finales del siglo XIX, principalmente como aglutinante para los negativos sobre vidrio.
El papel albuminado fue introducido un año antes que el colodión, en 1850, por el francés Louis Desiré Blanquart Evrard. De esa forma el aglutinante de albúmina, obtenido a partir de la clara del huevo, fue usado para las impresiones sobre papel, mientras que el colodión se empleó para los negativos (Valverde, 2003).
El aglutinante de gelatina, componente proteico derivado del colágeno, se implementó para uso fotográfico en la década de 1880. Desde entonces hasta la actualidad, es el medio que se ha usado como portador de las partículas que forman la imagen (Valverde, 2003).
Figura 3. Materiales formadores de imagen
© Mónica del Collado
Como sintetiza María Fernanda Velvarde (2003), la imagen final de una fotografía puede formarse gracias a la acción de sales de plata, de hierro, platino, cromo o por pigmentos y colorantes.
La mayor parte de los procesos fotográficos desarrollados durante los siglos XIX y XX está producida mediante sales de plata. Tal es el caso de procesos como el papel salado, la albúmina, la plata-gelatina de impresión directa y de impresión por revelado, entre otros.
El proceso de cianotipia forma imágenes a partir de sales de hierro, mientras que el de platino/paladio lo hace gracias a la acción de oxalatos de hierro con sal de platino.
Otro tipo de procesos, como la impresión al carbón, forman imágenes mediante pigmentos, mientras que las imágenes de los procesos fotográficos a color están conformadas por tintes.
Image Permanence Institute (IPI) (2019). Graphics Atlas: Identification. Graphic Atlas. http://www.graphicsatlas.org/identification/?process_id=266
Valverde, M. F. (2003). Los procesos fotográficos históricos. México: Archivo General de la Nación.
Valverde, M.F. (2005). Photographic negatives: Nature and Evolution of Processes. Rochester: Advanced Residency Program in Photograph Conservation.