(1852-1870)
Abrasión. La imagen es muy susceptible, sobre todo si no fue barnizada.
Obscurecimiento o pérdida de contraste. Si la imagen no fue barnizada o el barniz fue insuficiente, las partículas de plata pueden oxidarse por el contacto con el aire. El deterioro por la oxidación del barniz también afecta la imagen.
Roturas. Debido a la naturaleza del soporte de vidrio, los ambrotipos enfrentan el riesgo de romperse fácilmente.
En general los ambrotipos son raros de encontrar en colecciones de México; sin embargo, existen acervos con una cantidad extensa de ejemplares.
Louis-Désiré Blanquart-Evrard descubrió el proceso del ambrotipo, que básicamente es similar al del negativo de colodión.
La imagen es un positivo directo. La placa de la imagen es un vidrio con un recubrimiento de nitrato de celulosa, sensibilizado con sales de plata (bromuros), al igual que en el negativo de colodión. Sin embargo, la imagen es subexpuesta y después tratada químicamente, lo que le da un tono blanquecino en vez de café. Finalmente es barnizada.
Como citar esta colaboración:
Apellido, nombre (año), “Título del artículo”, en Archivo Churubusco, año 1, número 2, disponible en -dirección en internet-, consultado -día, mes, año-.